La mexicana Adriana Barraza tiene medio siglo de carrera artística. Esta actriz es, además, maestra de actores y actrices y una voz para las nuevas generaciones. Premios PRODU la reconoció por Una Vida de Dedicación Artística.

En diálogo con la presentadora Jimena Gállego, Barraza contó que su pasión por el arte comenzó por la danza, aunque nunca pudo practicarla, y que durante la preparatoria en Toluca, su pueblo natal, una serie de circunstancias la llevaron a tomar clases de teatro. “Yo era una niña de 15 años que tenía muchas carencias emocionales porque mi mamá ya no estaba (falleció cuando Adriana tenía 12 años), mi papá era riguroso y los cinco hermanos estábamos cada uno por su lado. En el teatro descubrí a otras personas que tenían las mismas necesidades que yo, y en compañía de ellas podía ser otra persona y encontrar otras vidas, que además yo era buena en eso” explicó Barraza.

Su primera telenovela fue Cristal y su primer casting fue para el cine, gracias a una sugerencia del gran Roberto Gómez Bolaños, quien había visto a Adriana actuando en Alguna vez tendremos alas (novela producida por Florinda Meza). Así, Barraza consiguió un pequeño papel en la película La primera noche (1998) y con su talento fue haciéndose un lugar. El gran salto fue con Amores perros (2000), de Alejandro González Iñárritu. “Años después, estando en Argentina me vuelve a buscar Alejandro y me ofrece actuar en Babel. Desde que mi marido lo leyó me dijo: vas a ganar el Óscar, no lo gané pero quedé nominada”.

Sobre su faceta como maestra, la actriz recordó que comenzó como muchos de sus trabajos, “entré a la docencia, porque tenía que comer, pero cuando empecé a hacerlo descubrí mundos hermosos y que tengo las habilidades necesarias para darle a alguien algo que le sirve, que es lo que más amo, poder dar un pedacito chiquito de mí para que otros hagan algo mejor” comentó.

Durante la entrevista, también se tocó el tema de salud de Barraza, quien ha sufrido de cáncer en varias oportunidades y de un infarto. “En el primer cáncer de piel no lo tomé con mucha seriedad el tratamiento porque quería actuar, gracias a Dios lo superé. Sin embargo, con el cáncer de mama me di cuenta de lo que es estar cerca de la muerte, por lo que hice conciencia sobre la importancia de detectarlo a tiempo para poder vencerlo”.

Barraza recibió el reconocimiento muy feliz y agradecida con PRODU, pues aseguró que estará siempre este Premio como una de las grandes preseas que se le hayan otorgado.